25 de mayo de 2022 | La investigación es una de las funciones académicas primordiales en la Universidad Centroamericana (UCA), a través de la cual se propicia el desarrollo institucional, la promoción de los conocimientos científicos y se brinda un aporte al desarrollo del país. Como parte de ese esfuerzo se promueve la inserción de jóvenes en los diversos centros e institutos de investigación de la Universidad, con el propósito de potenciar sus talentos y habilidades investigativas.
Una de esas jóvenes es Amalia Bornemann, quien cursa el quinto año de la carrera de Ingeniería Ambiental y desde hace dos años forma parte del equipo de investigadores del Instituto de Capacitación, Investigación y Desarrollo Ambiental (CIDEA). Conversamos con ella para conocer su trayectoria y cómo ha hecho de la investigación una estrategia para construir un perfil profesional integral y comprometido.
¿Cuáles fueron sus primeros pasos como investigadora?
Como parte del plan de estudio y de la metodología de enseñanza-aprendizaje que implementa la UCA en la formación académica, siempre se incluye la investigación. Los docentes motivan a tener pensamiento crítico en temas globales e indagar sobre ellos.
También, en la universidad existen espacios que son complementarios a la formación académica y que definitivamente ayudan no solo a desarrollar un perfil profesional sólido, sino que también brindan la posibilidad de iniciarse directamente como investigadores. Antes de llegar al CIDEA fui ayudante del laboratorio de química y ahí se me despertó un interés muy especial por aprovechar cada lugar y oportunidad que la UCA tiene para mi desarrollo integral.
¿Qué oportunidades brindadas por la UCA ha aprovechado?
Además de iniciarme como investigadora en el CIDEA, una de las experiencias más importantes fue realizar un intercambio académico en Alpen Adria Universität, en Klagenfurt (Austria), en el año 2019. Dicha oportunidad me ayudó a conocer diferentes culturas, idiomas y tradiciones. Por otro lado, estuve muy de cerca conociendo las diferentes tecnologías aplicadas a la Ingeniería Ambiental y eso me dio un impulso para reconocer qué se puede aplicar en Nicaragua y cómo sería factible implementar esa tecnología.
¿Cómo ingresó al CIDEA?
Conversando con un docente de la Universidad me enteré de la oportunidad de realizar pasantías en el CIDEA, por lo que fui a entregar mi currículum académico a la administración de este instituto. Luego pasé por un proceso de selección y quedé seleccionada. Ante el contexto de COVID-19 estuve capacitándome por muchos meses vía online, de hecho, el equipo del CIDEA estuvo pendiente de darme una buena base para comprender paso a paso cada proyecto y sus etapas.
Al poco tiempo de estar en CIDEA se dio la oportunidad de extender mi formación como investigadora por medio de la Beca USOS que promueve la UCA en conjunto con la Cooperación Suiza para América Central. Miré la convocatoria y apliqué. Así he logrado ganar experiencia, conocimiento y aportar con mi trabajo al desarrollo del país.
Coméntenos ¿cómo ha sido su experiencia en el CIDEA?
Llena de aprendizaje. Me he enfocado mucho en prácticas de laboratorio. Al principio esta área me daba mucho temor porque hay una gran cantidad de normas que se deben cumplir. Es necesario leer mucha literatura y realizar todo con mucho cuidado, pero logré vencer esos miedos, gracias a que mis supervisores me transmitieron un conocimiento base de calidad.
Actualmente estoy participando en dos proyectos, uno de ellos trata sobre la producción artesanal de bioinsumos, que es una sustancia con múltiples beneficios para el ambiente por ser a base de microorganismos nativos. Un segundo proyecto está enfocado en la producción hortícola ubicado en el norte del país.
¿Cómo valora los esfuerzos que realiza la UCA en torno a la investigación?
Agradezco que la UCA realice un esfuerzo en temas de investigación, porque en Nicaragua hay muchas barreras. Me siento satisfecha por la oportunidad de formar parte de un equipo de investigadores capacitados y en el cual me siento importante, ya que mis aportes son tomados en cuenta en las diversas investigaciones, protocolos y ensayos. Además, es invaluable saber que soy parte de un proceso que va a generar cambios sustanciales y positivos.
La investigación es la base del conocimiento y sin ella no se podrían generar proyectos, por lo que brinda una validez a cada proceso. Es trascendental el aporte que realiza la UCA no solo para motivar a las y los investigadores, sino en general, para estudiantes, docentes, entre otros.
Para mí fue importante tener mi primera experiencia laboral en la UCA, donde además aprovecho las actividades extracurriculares. Actualmente practica karate.
Sobre el CIDEA
Instituto de Capacitación, Investigación y Desarrollo Ambiental (CIDEA) se fundó en 1995 como un proyecto de la Facultad de Recursos Naturales, hoy Facultad de Ciencia, Tecnología y Ambiente. Cumple con una agenda enfocada en proveer conocimientos científicos y técnicos para una evolución en la agricultura nicaragüense, bajo los principios de la ecología integral. Las áreas en las que se enfocan son: utilización de bioinsumos, desarrollo de la pequeña agroindustria y sistemas de semillas.
Desde este instituto se trabajan cuatro líneas de acción principales: la docencia, la investigación, la proyección social y promoción de la justicia.